Hablemos de sexo
Cómo Comunicarte Con Tu Pareja Sobre el Sexo
Si alguna vez has leído columnas o blogs de consejos sexuales, hay un consejo que seguramente vas a ver – ‘comunícate’. Sin embargo, esto no es siempre fácil. La mayoría de las personas tienen sus propias inseguridades, traumas y disparadores, y el sexo es un tópico particularmente cargado. A nadie le gusta pensar que es malo en la cama, después de todo.
Bien manejada, la comunicación sexual es una de las mejores formas de fortalecer la unión con tu pareja. Es algo único que solamente los dos van a compartir. Es un secreto sexy y un beneficio de estar en una relación amorosa. Aunque puedas sentir pena, si conoces a alguien lo suficiente como para tener sexo, también conoces a esa persona lo suficientemente bien como para hablar sobre ello: compartir verdaderamente tu cuerpo con un amante también incluye compartir tu mente.
Con demasiada frecuencia, la comunicación sexual es compartir experiencias negativas: “No me gusta la forma en que tocas mis pechos,” o “No quiero sexo esta noche.” Sin embargo, si haces que la comunicación sexual sea una parte natural de tu relación, puedes equilibrar esta negatividad con elogios. Dile a tu pareja cuando te excita. Si te encuentras recordando un momento particularmente ardiente que pasaron juntos, díselo a tu pareja con cariño. Después de que prueban algo nuevo en la recámara, pregúntale si lo disfrutó, y comparte tus propias sensaciones sobre la experiencia. Al elogiar genuinamente las habilidades de tu pareja de manera regular, la ayudarás a sentirse menos a la defensiva cuando tú intentas pulir o corregir las experiencias menos placenteras.
También puedes convertir la comunicación sexual en un divertido juego previo. Túrnense para jugar al ‘maestro’ y al ‘alumno’ y dale a tu pareja una demostración práctica de dónde y cómo te gustaría que te tocara. Deja que tu amante practique, bajo tu guía, y una vez que te haya dado placer como más te gusta, premia a tu pareja cambiando de lugares y poniendo atención a su lección. No hay razón para que una lección sexy no pueda ser una parte semanal de tu vida; o si a esas vamos, cada noche, si tienes suficiente inspiración.
Tampoco pienses que la comunicación siempre tiene que ser verbal. Puedes escribirle a tu pareja un cuento erótico detallando exactamente lo que te gustaría hacer (no vayas demasiado lejos si es la primera vez que comparten fantasías: ve midiendo primero su reacción). Puedes enviarle a tu pareja un examen sexy, haciéndole una pregunta picante para obtener su respuesta. Puedes deslizar una clásica carta de amor en la bolsa sin que se dé cuenta, o probar juntos a tener sexo cibernético. Aún si están simplemente en dos habitaciones de la misma casa, la distancia que se crea puede ayudar a que sea más fácil abrirse: y quién sabe si puedan hacer realidad sus fantasías, si se comunican con suficiente efectividad.
Recuerda: la comunicación sexual es de doble sentido. Necesitas escuchar a tu pareja tanto como tú quieres enseñarle, y compartir tus propias preferencias tan abiertamente como tú esperarías que tu pareja te compartiera las suyas. Ten honestidad sobre tus necesidades y deseos, y será mucho más probable que obtengas el sexo y la relación que verdaderamente quieres.
"También puedes convertir la comunicación sexual en un divertido juego previo."